Oh! Mi amor
quiero recibir
tu silencio en mi
la ilusión que no tiene fin.
Haceme bién
tu árbol estival
es de aquel lugar
donde ayer comenzó el sol.
Y en las manos,
las selvas del aire.
Dunas de un cuerpo guaraní.
Creo que
siempre hay una señal
para amarte más
en la luz, o en las sombras.
Y en las manos,
las selvas del aire,
dunas de un cuerpo guaraní.
Tengo que ver soldados ya perdidos,
rosas muertas...
¡Oh!, mi amor
quiero recibir
tu jilguero en mí,
la ilusión.